1. Las Palabras Clave son tus Aliadas
Las palabras clave son esas frases que tus posibles clientes escriben en Google cuando buscan algo. Piensa en ellas como pistas para que Google sepa de qué va tu web. ¿Cómo encontrarlas? Usa herramientas gratuitas como Google Keyword Planner o Ubersuggest, o simplemente ponte en los zapatos de tu cliente ideal y piensa en lo que buscaría.
Consejo Pro: No abuses de las palabras clave. A Google no le gusta que las metas a la fuerza en cada oración. Úsalas de forma natural para que tu contenido fluya.
2. Escribe Contenido Útil y Relevante
A ver, Google no es tonto. Si quieres que te ponga en las primeras posiciones, tienes que darle contenido que realmente ayude a tus visitantes. Nada de «relleno» ni información que no aporta nada. Piensa en los problemas o preguntas que tus clientes puedan tener y crea contenido que los resuelva.
Recuerda: Entre más útil sea tu contenido, más tiempo pasarán tus visitantes en tu web, y eso a Google le encanta.
3. Cuida los Títulos y Encabezados
Los títulos y encabezados (H1, H2, H3…) son como señales de tráfico para Google. Le dicen al buscador sobre qué trata cada sección de tu página. Usa un título H1 que describa claramente el tema principal de cada página y organiza el contenido con subtítulos H2 y H3.
Tip rápido: Incluye tus palabras clave en los títulos, pero sin exagerar. Un buen título atrae tanto a Google como a los visitantes.
4. Optimiza las Imágenes, que También Importan
No solo el texto importa. Las imágenes también pueden ayudarte a posicionarte mejor en Google. Asegúrate de que tus imágenes tengan un tamaño adecuado para que no ralenticen tu sitio y usa el atributo «alt» para describirlas, incluyendo palabras clave cuando sea relevante.
Pro Tip: Un sitio que carga rápido es un sitio feliz. Así que optimiza tus imágenes y reduce su peso sin perder calidad.
5. Enlaces Internos y Externos: Amigos de Google
Google adora los enlaces bien utilizados. Los enlaces internos (que llevan a otras páginas de tu sitio) ayudan a que los usuarios exploren tu web, y los enlaces externos (a sitios de confianza) demuestran que tu contenido está bien respaldado. Solo asegúrate de que los enlaces externos vayan a sitios confiables y relevantes para tu contenido.
Consejo: No llenes tu web de enlaces solo porque sí. Todo en su justa medida y con sentido.
6. Móvil Primero: Asegúrate de que Tu Web Sea Responsiva
Más de la mitad de las búsquedas en Google vienen desde dispositivos móviles. Así que si tu web no funciona bien en el celular, Google te va a castigar. Asegúrate de que todo se vea y funcione perfecto en cualquier pantalla, desde un smartphone hasta una tablet.
Dato Importante: Google valora tanto la versión móvil de tu web que puede afectar tu posición en los resultados si no está optimizada.
7. Publica Contenido Regularmente
Google ama las webs que están vivas. Si publicas contenido fresco y actualizado regularmente, estás diciendo «¡Hola, sigo aquí!» Esto no solo te ayuda a atraer a Google, sino que también te mantiene relevante para tus visitantes. Así que crea un calendario de contenido y mantén tu sitio en movimiento.
8. Revisa la Velocidad de tu Web
Si tu web tarda en cargar más de unos segundos, adiós visitantes… y Google también se enfadará. Usa herramientas como Google PageSpeed Insights para analizar la velocidad de tu página y optimiza todo lo que puedas. Menos tiempo de espera, más amor de Google.
Conclusión: El SEO No Es Magia, pero Funciona
No necesitas una varita mágica ni un título en ciencias informáticas para ganarte el cariño de Google. Con algunos ajustes, un poco de lógica y contenido útil, puedes mejorar tu posición y atraer a más personas a tu web. Así que, ¡manos a la obra! Si necesitas ayuda para darle flow a tu SEO, en Disseny estamos listos para ayudarte.